En la bibliografía de
emprendimiento, el Minimum Viable Product
(MVP), no tiene un significado claro. En realidad si ya tenemos una primera
versión del producto/servicio y se está empezando a vender en un Early Market podemos hablar de Mínimo
Producto Vendible (Minimum Saleable
Product, MSP). Sin embargo, si el producto/servicio es todavía un concepto en
desarrollo, no es todavía un producto, sino una maqueta o un demostrador, entonces
podemos hablar de un Mínimo Demostrador Viable (Minimum Viable Demonstrator, MVD).
En realidad, no estamos hablando
solamente un problema de denominaciones o incluso del estado de desarrollo del
proyecto, sino de cómo vamos a comunicar nuestro proyecto con los potenciales
clientes.
Cuando se va a encuestar a los posibles
clientes y todavía solamente se tiene un MVD, las preguntas han de tener una
estructura muy general y estar diseñadas para saber cómo gustaría que fuese el
producto/servicio que pretendemos desarrollar. En esta fase no pretendemos
vender nada, lo que queremos es ayuda y conocer su opinión. Esto predispone a
nuestro interlocutor a colaborar de una forma abierta. En este caso las
encuestas se diseñan de forma abierta y dirigidas a sugerencias y
recomendaciones tanto sobre los aspectos y funciones del producto/servicio como
las estrategias de comercialización, el soporte post-venta, etc.
En el caso de estar en una fase
de MSP, ya tenemos la primera versión del producto/servicio que puede ser
interesante para el interlocutor. Las preguntas ya no son generales, sino
concretas y van dirigidas a saber en qué condiciones estaría dispuesto a
comprarlo. En este caso la posición del posible futuro cliente es muy distinta
y muy probablemente menos abierta y confiada.
En el caso del estado de MVD
solamente se necesita un esquema o un presentación y si es posible un
demostrador. En el caso de MSP se necesita tener un producto vendible, pero no
un máximo producto con todas las características deseables, porque para llegar
a ellas se necesitará más experiencia, tiempo y dinero. La propuesta final del
sistema puede tener multitud de funciones, pero hay que desnudarlo de funciones,
hasta dejar las imprescindibles. El MSP ha de ser un primer prototipo, aunque
sea limitado a las funciones básicas que el cliente necesita que se cubran. En
resumen el MVP es en realidad un MVD más MSP.