En las elecciones de este domingo ha vuelto a ganar de nuevo el PP. Creo
que un partido de derechas en este país es necesario y conveniente, pero el PP
en la actualidad no es el partido de derechas moderno que necesita España, es
el partido de la corrupción generalizada.
No entiendo a esta sociedad, mi sociedad. No solamente no les ha dado un
voto de castigo para que hagan una catarsis interna que expulse a los corruptos
fuera de sus filas, sino que les ha premiado por robar. Ante los resultados
electorales del domingo, el mensaje que el país está dando al PP es el
siguiente: “Sigan ustedes robando que nosotros les seguiremos votando”
No dejo de preguntarme porque casi ocho millones de electores le han dado
otra vez el voto a esta gente. No entiendo porque me mortifican estos electores
dejando que me sigan robando. Si la ley electoral me permitiese dar votos en
negativo o en negro. Mi voto en negro sería para el PP. Lo necesita el país, lo
necesito yo y también lo necesita el propio PP (aunque no lo parezca).
En la independencia de Cataluña, yo soy firme partidario de permitir el
referéndum, ya lo he dicho en este Blog varias veces, hay ciudadanos catalanes
que votarían Sí a la independencia, al “Catxit”, con el corazón y también hay
catalanes que votarían NO con el corazón. En este momento post-electoral, si
pudiese, yo votaría SÍ a la independencia, pero no con el corazón, sino con la
cabeza. Es la única manera de escapar de una sociedad a la que quiero, pero a
la que racionalmente no comprendo y que este domingo me ha dejado cabreado y desconcertado.