La definición de emprendedor en
el sentido empresarial ha ido cambiando con el tiempo. Desde el de revendedor
en el siglo XVIII (R. Cantillon), pasando por el de empresario en el siglo XIX (B.P.
Say) y la identificación con el de empresario-innovador en el siglo XX (J.
Schumpeter).
Hoy en día un emprendedor es la
persona que descubre oportunidades de negocio, pone estas ideas en marcha y
organiza los recursos para que el proyecto emprendedor se convierta en una
empresa. Podemos decir que el objetivo de un emprendedor es normalmente
convertirse en empresario, aunque hay emprendedores que siempre quieren ser
emprendedores y empiezan permanentemente nuevos proyectos. Son los
emprendedores en serie, los aventureros del emprendimiento.
La actividad que hace el
emprendedor es emprender, en cambio la que hace el empresario no tiene verbo.
¿Empresar? ¿Empresariar?. Un empresario es aquella persona propietaria o
copropietaria de una empresa que fija los objetivos de la misma y toma las
decisiones estratégicas, la gestiona directa o indirectamente basándose en los
recursos disponibles y asume las responsabilidades frente a terceros.
Estas definiciones no son
totalmente aceptadas, pasa lo mismo que con la diferencia entre una startup y
una empresa. La definición actual de startup es la de un proyecto en busca de
un modelo de negocio viable para convertirse en empresa. Sin embargo, la
empresa ya tiene el modelo de negocio y lo que hace es ejecutar un plan
estratégico (el plan de empresa) para explotar ese modelo de negocio. En
resumen, una startup es una proto-empresa de la misma forma que un emprendedor
es un proto-empresario.
En nuestro país los
emprendedores tienen buena prensa, son personas activas, guiadas por la pasión
más que por la razón, con ideas y con esfuerzo para llevarlas adelante,
generalmente gente joven y sin dinero suficiente para lograr sus objetivos. Sin
embargo, los empresarios no tienen buena prensa, la opinión pública piensa de
ellos que son depredadores de sus empleados a los que pagan lo mínimo
permisible y a los que exigen lo máximo posible y todo ello para enriquecerse. En
general esto no es así, la mayoría de los empresarios son personas que luchan día
a día por sacar adelante sus empresas y mantener a sus empleados, a veces en un
entorno poco favorable que no les deja opción a pensar en el futuro e innovar
procesos y productos. Sería interesante, que cuando los emprendedores acaben
siendo empresarios, mantengan ese espíritu innovador que les llevo a crear una
startup y traten de eliminar esa barrera que existe en la sociedad respecto a
los empresarios que lleva a separar entre buenos y malos a emprendedores y
empresarios.