Navegar en mar abierto implica
afrontar retos importantes, como la distancia o la comunicación. Cuando ocurre una
urgencia médica en mitad del océano, la capacidad de respuesta marca la
diferencia entre una evacuación o la desviación de la ruta y el cuidado seguro
y efectivo a bordo.
Con las constelaciones de
satélites como Starlink o OneWeb, que proporcionan banda ancha y baja latencia,
es posible resolver el problema de una comunicación eficiente en mar abierto, donde
una de las aplicaciones que da seguridad a los tripulantes y pasajeros es la
posibilidad de realizar videoconsultas para atender problemas médicos urgentes.
Las videoconsultas médicas
simples (solamente con videoconferencia) son, en muchos casos, insuficientes
para el médico de atención primaria o el especialista, ya que este no recibe datos
objetivos para poder realizar un diagnóstico confiable.
Para resolver este problema, se
ha desarrollado T-One en el CVC de la UAB. T-One es un sistema integral de
telemedicina que lleva la atención médica especializada directamente a
cualquier embarcación del mundo independientemente de donde se encuentre.
T-One es un sistema compuesto por
un ordenador, un software específico y conjunto de dispositivos médicos
digitales (fonendoscopio, electrocardiógrafo, dermatoscopio, otoscopio, visor
de garganta, tensiómetro, pulsioxímetro, etc.) que permiten al médico a
distancia hacer una videoconsulta y recibir en tiempo real los resultados de las
exploraciones que se hacen a un paciente en el barco.
El desafío
de la salud a bordo, sin acceso fácil a tierra, en barcos mercantes, grandes
cruceros o pesqueros, comparten problemas comunes, como el aislamiento
geográfico, un personal sanitario limitado, costes muy altos ya sea de evacuaciones
o de desvíos a puerto.
Ante estas situaciones, los
armadores buscan soluciones innovadoras que mejoren la seguridad y reduzcan
gastos operativos. Aquí es donde T-One actúa permitiendo realizar consultas
online con médicos generales o especialistas en tierra, enviando online y de
forma segura datos clínicos, imágenes,
sonido y vídeo.
Con T-One a bordo, los beneficios
concretos para armadores y operadores marítimos son, por ejemplo:
·
Reducción de costes operativos: Menos
evacuaciones innecesarias y menos desvíos de ruta.
·
Confianza y bienestar de la tripulación y
pasajeros: Mayor retención y satisfacción del personal.
· Atención médica de calidad: Atención rápida y
especializada que evita retrasos críticos en el tratamiento con un diagnóstico
más preciso, el seguimiento de casos y soporte especializado las 24 horas.
El sistema T-One ha sido diseñado
para ser intuitivo y autónomo, ideal para: Barcos mercantes con tripulación
reducida, cruceros con miles de pasajeros o pesqueros que pasan semanas en alta
mar. El entrenamiento y el soporte remoto está siempre disponible.
La industria marítima evoluciona,
y la salud a bordo no puede quedarse atrás. Con T-One, cada barco se convierte
en una extensión del sistema de salud en tierra, ofreciendo seguridad,
confianza y eficiencia a cualquier distancia.