jueves, 10 de julio de 2025

Telemedicina en altamar: la solución T-One para atención médica sin distancias


 

Navegar en mar abierto implica afrontar retos importantes, como la distancia o la comunicación. Cuando ocurre una urgencia médica en mitad del océano, la capacidad de respuesta marca la diferencia entre una evacuación o la desviación de la ruta y el cuidado seguro y efectivo a bordo.

Con las constelaciones de satélites como Starlink o OneWeb, que proporcionan banda ancha y baja latencia, es posible resolver el problema de una comunicación eficiente en mar abierto, donde una de las aplicaciones que da seguridad a los tripulantes y pasajeros es la posibilidad de realizar videoconsultas para atender problemas médicos urgentes.

Las videoconsultas médicas simples (solamente con videoconferencia) son, en muchos casos, insuficientes para el médico de atención primaria o el especialista, ya que este no recibe datos objetivos para poder realizar un diagnóstico confiable.

Para resolver este problema, se ha desarrollado T-One en el CVC de la UAB. T-One es un sistema integral de telemedicina que lleva la atención médica especializada directamente a cualquier embarcación del mundo independientemente de donde se encuentre.

T-One es un sistema compuesto por un ordenador, un software específico y conjunto de dispositivos médicos digitales (fonendoscopio, electrocardiógrafo, dermatoscopio, otoscopio, visor de garganta, tensiómetro, pulsioxímetro, etc.) que permiten al médico a distancia hacer una videoconsulta y recibir en tiempo real los resultados de las exploraciones que se hacen a un paciente en el barco.

El desafío de la salud a bordo, sin acceso fácil a tierra, en barcos mercantes, grandes cruceros o pesqueros, comparten problemas comunes, como el aislamiento geográfico, un personal sanitario limitado, costes muy altos ya sea de evacuaciones o de desvíos a puerto.

Ante estas situaciones, los armadores buscan soluciones innovadoras que mejoren la seguridad y reduzcan gastos operativos. Aquí es donde T-One actúa permitiendo realizar consultas online con médicos generales o especialistas en tierra, enviando online y de forma segura datos clínicos, imágenes, sonido y vídeo.

Con T-One a bordo, los beneficios concretos para armadores y operadores marítimos son, por ejemplo:

·        Reducción de costes operativos: Menos evacuaciones innecesarias y menos desvíos de ruta.

·        Confianza y bienestar de la tripulación y pasajeros: Mayor retención y satisfacción del personal.

·       Atención médica de calidad: Atención rápida y especializada que evita retrasos críticos en el tratamiento con un diagnóstico más preciso, el seguimiento de casos y soporte especializado las 24 horas.

 Como ejemplos de casos de uso reales podemos mencionar: a) el de un tripulante con dolor torácico se conecta vía T-One, comparte un ECG y recibe diagnóstico y tratamiento inmediato desde el botiquín que tiene que llevar todo barco; b) el de un pasajero en un crucero con una fractura que recibe asesoría de inmovilización por un traumatólogo en remoto o c) evaluación en tiempo real de brotes infecciosos a bordo para contenerlos de manera efectiva.

El sistema T-One ha sido diseñado para ser intuitivo y autónomo, ideal para: Barcos mercantes con tripulación reducida, cruceros con miles de pasajeros o pesqueros que pasan semanas en alta mar. El entrenamiento y el soporte remoto está siempre disponible.

La industria marítima evoluciona, y la salud a bordo no puede quedarse atrás. Con T-One, cada barco se convierte en una extensión del sistema de salud en tierra, ofreciendo seguridad, confianza y eficiencia a cualquier distancia.